Las cosas nuevas casi siempre nos parecen intimidantes, no creo que haya alguien que diga que no es así, a casi todos nos debe pasar como (y aquí debo advertirles que generalmente me van a leer alguna referencia a una película, libro, serie, libro, canción,etc.) a la princesa Disney que pasa casi toda su vida encerrada en una torre y cuando por fin sale de ella tiene su conflicto interno con que si lo que hae está bien o no, si lo que hace lastimará a su madre. Aunque después de un rato (imagino que aun con ese gusanito de remordimiento en su cabeza), decide arriesgarse a ir por su sueño.
Entonces, intentar algo nuevo... en algún momento me conseguí en instagram una página que promocionaba un concurso con premio en $$ por escribir un microrelato utilizando una palabra clave dada por ello... interesantísimo ¡obviamente!, así que no tardé casi nada en inscribirme <<¡esto debe ser muy fácil!>> fué lo que pensé, antes llevaba un diario electrónico y escribía mucho, tal vez sería tan fácil como aquello, y lo cierto es que al leer los relatos de los concursantes, ¡me bloqueé! ¡las ideas que tenía se congelaron y mezclaron al derretirse!, camino al trabajo iba pensando en qué esribir y en que parte de mi microrelato meter la palabra clave... Finalmente, se me ocurrió algo, iba escribiendo en una nota en el teléfono lo que se me ocurría, cada vez un poquito más y cuando ya tuve el borrador, pues lo envié.
Dos o tres días después, recibo una notificación de que había recibido una crítica de mi escrito. En resumen: no está tan mal, ¡solo que no es un microrelato!
Bueeeee... peor era que me dijeran que mejor cerrara la cuenta en esa página o algo así.
La mejor parte de todo es que renovó mi gusto por eso y aquí me tienen. Por ahora solo colocaré letras porque, en realidad no he explorado todas las bondades de esta herramienta (¿será así que se le dice?) y mi tiempo es un poquito limitado para ilustrarles con imágenes todo lo que escribo (además de que debo leer si hay reglas para el uso de las imágenes de internet! jajajaja).
Por algo hay que empezar así que... ¡no lo pensemos demasiado!
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